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  • 12/Jul/2014

Los bomberos voluntarios trabajaron en los operativos por las inundaciones en el litoral


1598_43w-2Desde fin del mes de junio y debido a las fuertes lluvias y las crecidas de los ríos Paraguay, Paraná y Uruguay, varias localidades quedaron aisladas y más de 14 mil personas debieron abandonar sus hogares en las provincias de Formosa, Chaco, Corrientes, Misiones y Entre Ríos.

Los Cuerpos de bomberos voluntarios de todas las zonas afectadas por las inundaciones trabajaron sin pausa y codo a codo con los organismos de protección civil, salud, seguridad y desarrollo social para aplacar las terribles consecuencias de este flagelo.

La combinación de lluvia con el colapso de un dique en Brasil desbordaron los ríos Uruguay, Paraná e Iguazú, mientras que a unos kilómetros las tormentas acaudalaron al Paraguay y pusieron de emergencia toda su costa.

Las zonas más afectadas de la provincia de Misiones fueron Soberbio, Andresito, San Javier, Mojón Grande, Itacaruare, Panambi, Alba Posse y Colonia Aurora.

“Nuestras Asociaciones estuvieron a disposición durante toda la emergencia. Los cuarteles de Oberá, Aristóbulo del Valle, Dos de Mayo, San Vicente, Eldorado, San Pedro y Montecarlo colaboraron con la provisión de agua potable y con todas las tareas que surgían según necesidades que requería el Comité de Emergencia”, comentó Waldemar Laumann, presidente de la Federación Misionera.

“Los bomberos de El Soberbio se destacaron en esta labor ya que, a pesar de que hace solo unos años comenzaron con la Institución, les sobra vocación de servicio, como ser la de un Bombero que mientras acudía a socorrer y evacuar personas, su casa fue llevada por el agua… a pesar de esto siguió con su tarea, es un ejemplo de altruismo”, dijo el dirigente.

Los integrantes de los cuarteles de San Javier y Santa Rita también trabajaron arduamente ya que en sus propias localidades sufrieron inundaciones y debieron evacuar personas.

El presidente de la Federación expresó que “gracias a Dios no hubo que lamentar vidas humanas y destacó el trabajo de los bomberos voluntarios ya que la Federación trabajo con logística y recursos propios”. Además, rsaltó el accionar de cuarteles de toda la provincia que brindaron alojamiento a los inundado y juntaron en sus cuarteles ropa, agua, alimentos no perecederos y demás donaciones que fueron entregadas a los afectados por la crecida del Rio Uruguay.

Mientras tanto, en la provincia de Formosa, al menos unas 8000 personas fueron evacuadas y las localidades de Clorinda y Puerto Pilcomayo resultaron más afectadas por este terrible flagelo. En este sentido y por la gravedad de la situación, el gobernador Gildo Insfrán, declaró el estado de emergencia en toda la zona ribereña del río Paraguay, desde el Pilcomayo hasta la desembocadura del río Bermejo.

Un panorama similar se presentó en las provincias de Chaco y Corrientes, donde la crecida del río Paraná sumada a las intensas lluvias complicaron la situación de miles de evacuados.

En este sentido, el presidente de la Federación de Bomberos de Chaco Carlos Alfonso comentó que en su provincia actuaron los cuarteles de Barranqueras, Isla del Cerrito, Margarita Belén y Las Palmas que son las localidades afectados por encontrarse sobre la rivera.

“Nosotros participamos de las reuniones que convoca Defensa Civil de la Provincia y de los distintos municipios y en la tarea de prevención que se realizó antes haciendo conocer a la gente que debían evacuarse y ayudando con la protección de bienes y animales. El Río Paraná, al crecer, complicó otras zonas y los bomberos actuaron con sus lanchas y botes para colaborar con la gente en la evacuación y acercando mercadería”, explicó Alfonso.

Desde las Federaciones se trabajó a través de las entidades de base, los Cuerpos de bomberos, y en coordinación con los organismos provinciales.En todos estos lugares, los integrantes de los Cuerpos de bomberos voluntarios están a disposición de los Comités de Crisis y afectados a las tareas de rescate y resguardo de las víctimas.

En Corrientes, explica el presidente de la Federación Manuel Palacios, el problema empezó en la zona alta del Paraná, en Itatí, la Isla Apipé Grande y luego se extendió a la costa de Corrientes capital. Los días siguientes llegó a Goya y continuó hacia abajo. Luego, al elevar el nivel de agua el río Uruguay, se vieron afectadas otras localidades como Santo Tomé y las costas de Yapeyú, La Cruz, Alvear, hasta llegar a Paso de los Libres.

Mientras tanto, en Entre Ríos, las localidades más afectadas fueron Concordia, Federación, San José, Colón, El Brillante, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú. “Estamos alertas a nuevas crecientes sobre la costa del Uruguay porque se rompió una represa en Brasil pero mientras no llueva la situación en Concordia no se va complicar. Desde que comenzó todo esto están en alerta las 5 Regionales con los cuarteles que las integran”, explicó Leandro Arribalzaga, presidente de la Federación Entrerriana.

“Los bomberos trabajan en coordinación con Defensa Civil y las municipalidades. Tenemos un sistema operativo y trabajamos previamente en las evacuaciones en seco y realizando tareas preventivas. Bomberos está respondiendo en todos los casos y a disposición de los organismos gubernamentales. El Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios también estuvo a disposición desde el comienzo para lo que necesiten nuestros Cuerpos”, dijo Arribalzaga.

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